Nombre de la parte superior de las pirámides y obeliscos. La costumbre, que data de las construcciones del Imperio Antiguo, era proporcionar a la pirámide una piedra de coronamiento de un tipo de piedra diferente y más dura. Se han conservado los piramidia de algunas de las pirámides de adobe del Imperio Medio. Durante el Imperio Nuevo las tumbas de los particulares incluían pequeñas pirámides de ladrillo que, a menudo, tenían un piramidion de arenisca, caliza, granito o incluso fayenza. Ocasionalmente, esos piramidia poseen relieves que representan preferentemente motivos solares. La parte superior de los obeliscos también tiene forma de pirámide y por ese motivo también se le llama piramidion; aunque en este caso no es un bloque separado. A menudo, las puntas de los obeliscos estaban recubiertas de metal, por lo general electrum.